jueves, 30 de agosto de 2012

Contexto histórico-político



 Contexto histórico-político


La época en la que vivió Sor Juana Inés de la cruz se refiere a una etapa donde gobernaba España, principalmente los monarcas de Habsburgo.

La autoridad máxima era el virrey (representante del rey) y se destacaron la Audiencia y el Cabildo. Justo en este momento en donde llega a su etapa final la preponderancia de España sobre Europa.

A lo largo de estos años el virreinato español tenía bajo su mando la ciudad de México la cual era el centro político, administrativo, económico y religioso más importante de la colonia. Esta etapa fue conocida como “siglo de la depresión económica y del reacomodo social”.

La historia del México virreinal prosigue con la etapa considerada de formación e integración de varios aspectos en la sociedad novohispana. Abarca desde las primeras décadas del siglo XVII hasta el último tercio del XVIII.

La sociedad era de tipo estamental, es decir organizada en grupos de estados o estamentos. Cada grupo tenía sus caracteres propios y resultaba difícil mezclarse entre sí.

El alto clero y la nobleza formaban el primero y segundo estamento. Gozaban de los mismos privilegios como derecho a cargos reservados, exentos de pago de impuestos, derecho a tener leyes y tribunales propios, así como todo un código de honor que los separaba de los demás.Vivían fundamentalmente de las rentas de sus propiedades.

El tercer estamento lo componía el resto de la población, desde el rico banquero hasta el humilde campesino. Vivían de su trabajo, con muchas obligaciones para con el Estado, la Iglesia y sus señores. Sin embargo los más ricos e ilustrados acabarían ocupando altos cargos en el Estado, comprando títulos nobiliarios y poco apoco desplazando del poder a los privilegiados.

Desde los primeros años de la conquista, los frailes evangelizadores consideraron la coexistencia de dos culturas, que tenían modos de vida diferentes, a las que llamaron "Las dos repúblicas", la de indios y la de españoles, para las cuales se dictaron normas y reglamentaciones distintas, en relación con la vida familiar y al trabajo.

La forma de vida de los naturales cambió radicalmente, tanto en sus costumbres como en su manera de concebir el mundo, su manera de vestir, de comer, al igual que la forma de celebrar sus fiestas y de practicar su religión. Como los pueblos de indios fueron obligados a permanecer en las cabeceras de los municipios, por ello sus unidades políticas anteriores fueron desapareciendo, primero en los lugares cercanos a las ciudades y después en los lugares más lejanos.

En este país, las dos culturas que se fusionaron en la Colonia, la Indígena y la Española, poseían un profundo sentido religioso en el que se mezclaron ritos, leyendas y antiguas creencias que desembocaron en una nueva concepción, una nueva cultura que dio paso a lo que hoy conocemos como; México. El indígena aún no se recuperaba de la sorpresa causada por la ruda invasión, cuando ya se encontraba trabajando arduamente en la construcción de templos y edificios. Estas estructuras tuvieron diferentes corrientes que diseñaron y llevaron a cabo el estilo de estas obras.

La importancia del periodo colonial es determinante tanto para la historia del país como nación independiente como para la historia de todo Occidente, ya que, a partir de ese momento, América entró a formar parte del mundo que hasta entonces conocían los europeos.

La religión católica ganó nuevos e importantes territorios, cambió el lenguaje, la traza de las ciudades, las manifestaciones culturales y artísticas y se inició el mestizaje o sincretismo, es decir la mezcla entre los conquistadores y los conquistados, combinación que definió el carácter actual que tiene México.

Es en este periodo cuando pensadores novohispanos como Sor Juana Inés de la Cruz expresaron las aspiraciones de una nueva sociedad en busca de valores propios. Como parte de este proceso se admiran algunos de los logros estéticos en el campo de las artes con el auge del barroco y la relevancia de símbolos religiosos como el de la Virgen de Guadalupe.